Un maestro zen se paró delante de un quiosco de churros y le dijo al empleado:

- “Póngame cinco euros”.

El empleado le preparó los churros y entregó la bolsa al maestro. Éste no tenía cambio y le dio un billete de 20 €. El vendedor de churros cogió el billete, lo guardó en la caja y se dispuso a atender al siguiente cliente.

- “¿Dónde está mi cambio?” le preguntó el maestro zen.

El vendedor de churros le respondió:

- “Su cambio sólo puede venir de su interior”. :)

Via: Maru Canales,Imagenes Google.